El otro día, sin saber mucho por qué, a Rosa Alonso Gao le entró una de esas necesidades imperiosas de dar un paseo y lo hizo. Como equipaje, sólo necesitó lo de siempre: un palo. Correlativamente el susto que se llevó su hermana Anita fue mayúsculo. Tenemos que tener en cuenta que desde hace mucho tiempo no sale del recinto del portal de casa y que Anita está a su cuidado, con muchísimo mérito, siendo Rosa nonagenaria y Anita también con muchos años a cuestas. Es lo que sucede algunas veces con la gente mayor, que la cabeza, más bien debemos decir la mente humana, resultan totalmente impredecibles y los demás solemos caer en el error de intentar buscar una explicación "razonable" a estas acciones. A lo que íbamos, Rosa Alonso dio un paseo sola y se paró a descansar delante de la casa de Juanjo, donde hay un poyete que invita al descanso.Este hecho, desde el punto de vista de Anita, es una "zurdería" que movió a los vecinos a buscarla. Eso sí, de esas que tienen final feliz. Porque una vez que pasan, a los de fuera pueden causarnos gracia, a todos menos al que lo vive en primera persona, que lleva un susto de muerte.
Son Pepe el de Enedina (José Cabeza Calvo), su sobrina Jesusa Alonso Cabeza (hija de Ángeles) y Rosa Alonso Gao.
Fuente: Francisco Poli, Fran
0 comentarios:
Publicar un comentario