Uno de los maravillosos tributos que siempre exige la naturaleza en su estado salvaje, es que mires a donde mires, siempre merece la pena; porque el espectáculo que se ofrece ante tus ojos nunca te va a defraudar. Y esto es así para todos los paisajes, para todos los ecosistemas. En este caso lo que se ofrece es una serie de miradas desde Loncín, en el valle de Fresnéu. Es un ejemplo tan bueno como cualquier otro para mostrar una naturaleza pródiga en cuanto a la belleza, un botón de muestra del paisaje de esta Reserva de la Biosfera del parque Natural de Redes.
Pido perdón por la poca calidad fotográfica de las imágenes. Veo que están sobreexpuestas. Sólo la belleza que encierran puede disimular mi torpeza.
Aquí comienza todo. El Valle de Frenéu se cierra en La Pandellina. Terminan los "praos" de Les Cabianes ciñendo el río por la derecha, Los Bafales por la izquierda y el Coriscao pavoneándose al fondo.
El Coriscao y La Cabeza L'Arcu, protegiendo toda la pradería de La Braña Uxil.
La Cabeza L'Arcu a la izquierda y la Pena Rosques a la derecha, conforman un valle, el de El Cotu, que a mi parecer configura en el Cotu Arriba un microclima particular con una vegetación específica, abundante en mostajos, que particularmente me gusta mucho. Además en la parte alta de esta imagen, aparece el robledal, mientras que por La Zorera es un hayedo. Todo el conjunto configura una ruta bellísima, que se camina con facilidad, que ofrece múltiples centros de interés, incluyendo el bosque de ribera, y que paradógicamente no es muy transitada.
La Cabeza L'Arcu a la izquierda y la Pena Rosques a la derecha, conforman un valle, el de El Cotu, que a mi parecer configura en el Cotu Arriba un microclima particular con una vegetación específica, abundante en mostajos, que particularmente me gusta mucho. Además en la parte alta de esta imagen, aparece el robledal, mientras que por La Zorera es un hayedo. Todo el conjunto configura una ruta bellísima, que se camina con facilidad, que ofrece múltiples centros de interés, incluyendo el bosque de ribera, y que paradógicamente no es muy transitada.
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| Otra mirada de El Coriscao y la Cabeza L'Arcu. Debajo del Coriscao, está el Valle Mugalendi. Sólo lo crucé una vez cuando tenía 7 u 8 años con Florentino y su hijo Santiago. Habíamos salido de La Robriella y al pasar por La Almagrera, recuerdo que Florentino cogió una piedra de "almagre" y escribió en una "llavanona": "Por aquí pasaron tres" y añadió nuestros nombres. Era un acto simbólico y efímero, que me pareció bien en su momento y ahora recuerdo con enorme cariño. |
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