Nadie sabe a ciencia cierto cómo empezó ni quién fue el promotor de estos encuentros. La realidad es que los que llamaban a quintas para hacer el servicio militar en cada ejercicio en el concejo de Caso, suelen reunirse para comer una vez al año. Los nacidos en 1958, los quintos de ese año a los que pertenezco se reunieron el sábado pasado, día 28 de septiembre en su III encuentro. Solemos hacerlo haciéndolo coincidir con la Fiesta del Ballarte, en El Barru, un barrio de Campo de Caso y así la gente ya se dapor avisada.Como suele suceder, fue un encuentro en armonía, palabra que me gusta sobre manera, ya que en Caliao significa algo así como "disfrutando de la amistad y de la compañia". O sea, lo que significa en el mundo de la música trasladado al terreno de las relaciones sociales.
La comida, corderu a la estaca. El lugar Casa Avelino, en Linares. Ninguno tiene especial interés de que sea allí,ni tampoco lo contrario. Incluso a veces se habla que igual habría que pensar en otros hosteleros, pero como en general el grupo está contento con el sitio, hasta la fecha lo dio por bueno y siempre se celebró allí, dejando reservado el día de un año para otro
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El "asaor", Florentino, el de Félixy Conce, de La Felguerina. Llegando a ver cómo andaba el asado, Jaime Alonso Suárez, de Govezanes.
Los cuatro de Caliao: un servidor, José Froilán Gonzalo Capellín, Emilio Gonzalo Calvo y Luciano Santos Calvo Prado. A nuestra espalda, el verde de la zona y la Presa de Tanes.
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